Lali devoró el Delmi: un show feroz, sensual y explosivo en Salta
Este jueves, Lali Espósito desató toda su potencia artística en el Estadio Delmi, donde presentó su último disco "No vayas a atender cuando el demonio llama", en el marco de una gira que viene encendiendo escenarios por toda Latinoamérica.
Luego de conquistar el Antel Arena de Uruguay, la artista llegó al norte argentino con un espectáculo demoledor, que combinó música, actuación, moda y una producción escénica de alto nivel. En Salta, el público respondió con euforia: miles de jóvenes -y también muchas familias- se hicieron presentes para disfrutar de una noche única, marcada por la emoción, el baile y momentos memorables.
El show estuvo estructurado en siete actos, cada uno acompañado por un cambio de vestuario que reflejó distintas facetas de Lali como artista. Desde lo onírico hasta lo salvaje, cada pasaje ofreció una nueva lectura visual y sonora. Cuando interpretó Ego, la cantante apareció con un vestido blanco largo y una malla completa cubierta de flores y detalles rococó, evocando una estética de telenovela clásica. En canciones como Sola o Motiveishon, en cambio, lució un conjunto deportivo con una camiseta argentina intervenida, mostrando su costado más visceral y callejero.
Si bien el foco estuvo puesto en las canciones del nuevo álbum, Lali no dejó afuera sus grandes éxitos. Boomerang, Diva, N5 e Histeria encendieron al público y provocaron gritos, pogos y una auténtica fiesta pop.
El show fue una mezcla poderosa de sensualidad, orgullo y performance, con más de 30 artistas en escena, coreografías impactantes y una puesta visual que convirtió al Delmi en una auténtica pista de alto impacto.
Con esta presentación, Lali no solo reafirmó su lugar como una de las artistas más importantes del país, sino que volvió a demostrar que lo suyo es puro fuego escénico, entrega y conexión con su gente.