Hoy celebramos a la "Sagrada Familia"
La celebración invita a renovar los valores del diálogo, la oración y el amor que fortalecen la vida familiar en el mundo actual.
La Iglesia invita a reflexionar profundamente sobre la figura de la Sagrada Familia -José, María y el Niño Jesús- como modelo de fe, entrega y amor incondicional. Tal como recordó el Papa, ellos mismos debieron enfrentar peligros, dificultades y el dolor del exilio en Egipto, demostrando que, incluso en medio de la adversidad, el amor y la confianza en Dios lo pueden todo.
José, María y Jesús son considerados reflejo de la Trinidad y ejemplo para todas las familias del mundo. Su historia muestra que la vida familiar está llamada a sostenerse en valores trascendentes y no puede reducirse únicamente a los problemas de pareja o a las dificultades cotidianas, sino que debe entenderse como un verdadero signo del diálogo entre Dios y el ser humano.
En este contexto, la Iglesia remarca la importancia de una familia abierta a la Palabra, a la escucha mutua y al acompañamiento entre padres e hijos. La oración familiar ocupa un lugar central como fuente de fortaleza espiritual y unión. En este sentido, el Papa San Juan Pablo II solía recomendar con insistencia el rezo del Santo Rosario en el hogar, recordando una frase que marcó su pontificado: "la familia que reza unida, permanece unida".
En tiempos de desafíos sociales y personales, la Sagrada Familia continúa siendo un faro que ilumina el camino de quienes buscan construir hogares basados en la fe, el respeto y el amor verdadero.
Que el Niño Jesús, María y José protejan a todas las familias del mundo, las cubran con su amor y las fortalezcan en la unidad, la fe y la esperanza. Amén.
